Aquí estamos de nuevo con el segundo artículo referente a la limpieza de suelos.
¿Te da la sensación que el suelo de tu hogar no brilla tanto como querrías? Pues has llegado al sitio adecuado. Aquí estamos realizando una extensiva revisión de cómo tratar cada tipo de suelo. Vamos a continuar por el parqué.
Parqué
El parqué está compuesto de madera lo que lo hace sensible a la humedad o productos químicos, así como a ralladuras de materiales duros. Por eso hay que cuidarlo para conseguir que mantenga su brillo original.
Como cualquier otro tipo de suelo, dependiendo de los tratamientos que haya tenido la madera y el acabado en concreto hará que los diferentes trucos que ahora relataremos sean más o menos efectivos, es por eso que recomendamos encarecidamente que antes de hacer una limpieza general del suelo, antes se pruebe en un rincón que no esté a la vista, como por ejemplo debajo del sofá, para evitar posibles sorpresas luego.
Limpieza regular
Los expertos recomiendan evitar el uso de escobas, es mejor utilizar aspiradoras con cepillos de cerdas suaves, que ayudaran a eliminar el polvo y la suciedad que se va acumulando en el día a día. Además, a no ser que sea necesario no se recomienda realizar esta operación más de dos veces a la semana.
Para fregar el parqué la recomendación más importante es que se haga con la fregona bien escurrida, es por eso que también es recomendable que ésta sea muy absorbente, como la es el caso de la Ballarina de Pamex. Además, esta fregona es prácticamente un paño, lo que permite hacer tratamientos específicos para mantener el brillo del parqué. Aunque hay que destacar que para el día a día lo más importante es utilizar un producto de limpieza adecuado para parqués, porqué sino podremos dañarlo.
Otra recomendación es secar el suelo después de haber pasado la fregona, para eso siempre puedes usar una mopa que lleve paño de microfibra; además este utensilio para la limpieza también puede sustituir a la aspiradora para retirar el polvo y la suciedad, ya que existen de muchos tipos de mopas de microfibra y otras con paños electroestáticos que atraen el polvo.
Finalmente, el remate para conseguir el perfecto cuidado de la madera es utilizar una vez al mes un producto adecuado para el parqué que mejore su brillo. Y ya de manera más ocasional también se puede utilizar aceite de pino o linaza; así como ceras adecuadas para este tipo de suelos.
Truco casero
Si quieres mejorar el brillo de tu parqué puedes llevar a cabo este truco, pero solo de manera muy puntual, porque si se utiliza de manera regular éste será perjudicial. Con el suelo bien aspirado puedes realizar este proceso. Prepara un mezcla de 1 taza de vinagre por 4 litros de agua, entonces mojas un trapo o la fregona Ballarina, lo escurres bien y los pasas suavemente por tu parqué (recuerda realizar previamente pruebas en zonas que no estén a la vista). Una vez hayas terminado seca bien el suelo y ventila la estancia.
Manchas de grasa
Cuando sucede un accidente, como cuando cae algún plato de comida al suelo, es muy probable que lleve aceite o algún tipo de grasa, lo que provoca instantáneamente una mancha en este tipo de suelos. Por eso hay que actuar rápidamente aplicando polvos de talco, ya que estos absorberán el exceso de grasa. Se recomienda dejarlos durante 24 horas, para que hagan su efecto. Seguidamente deberán retirarse los polvos de talco con una aspiradora, lo que dejará la superficie de la mancha blanquecina, por eso el siguiente paso es limpiar la zona con un trapo humedecido en agua y un producto adecuado para parqués. Finalmente, como siempre, se deberá retirar el exceso de humedad.
Evitar ralladuras
Un consejo para evitar que el suelo acabe lleno de ralladuras es utilizar protectores adhesivos para las patas de los muebles u otra opción sería utilizar tacos que se pueden clavar directamente a los muebles, si estos son de madera. Con este tipo de productos conseguirás que cada vez que arrastres un mueble sea una caricia para tu parqué.
También es recomendable no andar por casa con zapatos de tacón de aguja que también pueden dañar este tipo de suelos; así como zapatos que puedan estar hechos con materiales que puedan rallar el parqué. De hecho, si se utilizan unas zapatillas de estar por casa de manera habitual, además evitaremos ensuciar el suelo y posibles piedras que puedan engancharse en algunas suelas de goma.
Otras marcas que pueden aparecer en este tipo de suelos son las que producen las mascotas; perros, gatos, etc.; con sus uñas, por eso es importante mantenerlas bien cortas.
En el caso que ya lleguemos tarde para estos cuidados para evitar las ralladuras, siempre queda la opción del lijado del parqué, siempre y cuando este sea de madera. En un suelo sintético no quedaría otra opción que cambiarlo.
Decoloración
Este es otro de los problemas que pueden afectar a tu parqué, ya que la madera va perdiendo color con su contacto con el sol. Ciertamente, no hace falta vivir a oscuras, pero si el parqué está en una habitación en la que no entramos mucho, la mejor opción es que las cortinas o persianas estén bajadas, de esta manera haremos que mantenga el brillo e intensidad de color durante más tiempo.